Guerrera rechazada

TRICORA

Nos sentamos y hablamos de nosotros durante lo que parecen horas, cuando escucho la idea más asombrosa... Mide por lo menos un metro noventa, tiene el pelo negro azabache y unos ojos tan oscuros que estoy segura de que son negros.

Es muy ancho de hombros y tiene músculos que descienden hasta una deliciosa línea en V que desciende más abajo. Estoy segura de que si pudiera oler su aroma sería divino. Quiere marcarme ahora, ya que soy humana y no puedo transformarme como los demás, lo que podría hacer que me atacara el Alfa Stern.

Si él me marcara, Theo no podría hacer nada. Tendría que alejarse. Por mucho que me hubiera gustado huir de mi compañero y que me persiguiera, entiendo su preocupación.

Decidimos que lo mejor es ir a un lugar apartado en el exterior con sus hombres montando guardia por si ocurre algo. Podemos terminar el asunto de la marca más tarde, pero por ahora solo me marcará a mí. Cree que esto puede sacar a mi lobo, ya que él es el rey alfa, pero estoy nerviosa. ¿Qué pasa si no funciona? ¿Y si me quedo atrapada como humana?

—¡Me importa una mierda si eres una loba o no! ¡Eres mi compañera, fin de la historia!

Me quedo mirándolo cuando las lágrimas empiezan a caer por mi cara. Me pone las manos en la cara y me hace levantar la mirada cuando me besa en los labios. Puedo sentir cada emoción en ese beso y sé que está siendo sincero.

Salimos de su habitación y nos adentramos en el bosque. Pedimos a sus hombres que nos sigan y buscamos un lugar apartado de todo el ruido. Lo observo cuando se sienta en el suelo con la espalda apoyada en un árbol y levanta los brazos para que me siente frente a él.

Por muy nerviosa que esté, nunca he estado más segura de nada. Este hombre me aceptó sin importar lo que soy. Debió notar que estoy nerviosa porque empezó a susurrarme al oído todo lo que le gustaba de mí para hacerme sonreír.

Siento que algo se agita en mi interior, como si quisiera liberarse, pero algo lo impide. Siento que Theo me abraza con fuerza y me hunde la cara en el cuello, besándome hasta encontrar el punto justo.

Siento que me lame el punto del cuello, lo que me arranca un profundo gemido, y noto cómo sonríe con satisfacción. Noto cómo me roza con los colmillos mientras intento arquear la espalda. Lo único que oigo es: —Recuerda que, pase lo que pase, siempre te querré.

Justo cuando hunde profundamente sus caninos empiezo a gritar.

***

ALFA STERN

Veo como salen del hotel y se adentran en el bosque. Intento permanecer lo más silencioso posible mientras enmascaro mi olor. Solo necesito acercarme lo suficiente para poder marcarla.

Cuando lo veo morderle el cuello y la oigo gritar, sé que era demasiado tarde. ¿Cómo puedo recuperarla ahora? Salto corriendo hacia ellos mientras sus hombres me atrapan.

—¡Noooooo!

Caigo de rodillas mientras la miro a los ojos y su grito se convierte lentamente en un gruñido. Empiezo a oír huesos romperse y sé que se está transformando.

No pensé que pudiera tener algo de loba hasta que descubrí quién era en realidad y sumé dos más dos. Había recibido sangre alfa y de Luna cuando fue aceptada en la manada y como hija de ellos.

Entierro la cabeza en el suelo hasta que oigo que los gruñidos y los movimientos se detienen. Levanto la vista y veo a la criatura más asombrosa ante mí: una loba blanca como la nieve, más grande que cualquier loba que haya visto, con ojos azules como el hielo mirándome fijamente.

Tiene marcas en las patas delanteras, y también marcas en el pelaje.

Me levanto despacio, con los ojos muy abiertos porque estoy casi frente a frente con ella. Resopla y me gruñe, y no la culpo. He sido un completo imbécil y ahora pagaré por ello.

Ella no lo ha marcado a él, así que hay tiempo para que a ella se le borre la marca. Me quedo allí mientras Canton, Darren y Brianna se acercan corriendo. Les ordeno que se interpongan entre ella y el rey alfa. Voy a forzar mi marca en el momento en que se vuelva a transformar.

Justo cuando empieza a transformarse me abalanzo sobre ella. En ese momento me agarran mis propios hombres. ¡Qué demonios están haciendo!

Sufro cuando la veo caminar hacia el rey alfa, tirar de él hacia ella, encontrar el lugar correcto en su cuello y hundir sus dientes mientras gruñe. —¡MIO!

Me quedo ahí de pie agachando la cabeza. Qué estúpido fui al no darle ni una oportunidad. ¡Qué le he hecho a mi manada!

***

REY ALFA THEO

Cuando la veo transformarse, se me parte el corazón, pero sé que el dolor es temporal. Cuando termina y veo a su loba me quedo asombrado. Ella es tan grande que debe tener más alfa en ella, en algún lugar de su linaje.

Nunca he visto a un lobo llevar sus tatuajes y marcas en su piel antes, así que tendremos que llegar a su familia para tratar de averiguar cualquier tipo de información.

Me quedo mirando como un idiota cada uno de sus movimientos, como si fuera una alucinación que puede desaparecer en cualquier momento. Estoy tan absorto en el momento que, antes de que pueda reaccionar, ella se ha transformado de vuelta, se ha acercado a mí y me ha clavado los colmillos en el cuello.

Caigo de rodillas al sentirla en mi cuello, algo que nunca antes había experimentado. La rodeo con mis brazos y me aferro a ella con todas mis fuerzas.

Hay algo diferente en ella, eso es seguro. No tengo ni idea de qué es exactamente y pasaré el resto de mi vida ayudándola a descubrirlo. Cuando saca sus dientes de mi piel, caigo de espaldas contra el árbol y me siento completamente agotado.

Mira a Alfa Stern, gruñendo y enseñando los dientes. Observo cuando gira la cabeza hacia Brianna y da un paso hacia ella. Les digo a mis hombres que la agarren antes de que mate a alguien, ya que aún no sabe controlar a su loba.

Reúno la energía suficiente para levantarme lentamente y atraerla hacia mí. Se entierra lentamente en mi pecho llorando, inhala mi aroma cuando veo que sus ojos cambian del azul hielo al verde.

Respiramos hondo y decidimos que tenemos que volver arriba para calmarnos. Cuando empezamos a caminar, su amiga Tara se acerca corriendo diciendo que ha llamado al padre de Tricora para que venga inmediatamente.

Decidimos que todos tenemos que ir arriba porque su loba, Jenna, no quiere que Tara vaya a ninguna parte ahora mismo.

Con la ayuda de mis hombres, nos dirigimos a mi habitación, donde me siento mientras Tricora se arrastra hasta mi regazo. Su loba está asustada y no entiende lo que está pasando, y no la culpo.

¿Estar escondida tanto tiempo y en el momento en que te liberan estar en medio de esta locura…? Solo espero que sus padres tengan alguna información.

Tara se acerca y se sienta a su lado cuando mi gatita alarga la mano para coger la de su amiga.

***

TARA

Estaba hablando cuando oí un grito y lo reconocí como el de Cora. Mi loba Ava se asusta porque no tenemos ni idea de lo que está pasando. Corro hacia donde lo escuché y cuando me acerco veo a esta loba blanca de pie, Ava sabe exactamente quién es.

Rápidamente enlazo mentalmente a su padre y le envío la imagen de la loba con mi teléfono. Rápidamente dice que están en camino y corta el enlace. Deberían estar aquí en unos veinte minutos porque el evento de este año se celebra cerca de nuestra manada.

Empiezo a acercarme cuando se levantan y empiezan a dirigirse hacia el hotel. Subimos todos y me siento junto a ellos, le cojo la mano y puedo decir que su loba está petrificada. Normalmente la gente se transforma a los dieciocho y es una especie de ritual.

Siempre hay gente que conoces en un entorno conocido... Aquí está ella con un compañero que acaba de conocer en un lugar que no conoce, y está cambiando a sus casi veinticuatro años.

Permanecemos sentados unos veinte minutos mientras la puerta se abre de golpe y estallan gruñidos y gruñidos.

—¡Está bien! No pasa nada. ¡Son sus padres y hermanos! ¡Los enlacé mentalmente para que vengan!

Tricora los ve y se levanta de un salto, corre hacia su padre y se lanza a sus brazos. El pobre Theo intenta levantarse pero sus hombres tienen que agarrarlo porque aún no tiene energía. Alfa Cannon la entrega a sus hermanos cuando se acerca al rey alfa.

—¿Qué está pasando exactamente? —pregunta Cannon mirando a su alrededor.

—¡Me marcó y es como si no me quedara energía! —responde Theo— No lo entiendo. Es mi compañera y nunca había oído que pasara esto. No es una loba normal. Tiene sangre alfa y ojos azul hielo de alguna parte. También sus tatuajes se transfirieron a su pelaje de lobo. ¿Sabes algo de eso?

—No, no... en el orfanato no nos dieron ninguna información, pero teníamos la sensación de que había algo que no nos estaban contando. Por favor, siéntese porque yo también estoy perdido —respondió—. El orfanato nos pidió que la adoptáramos. Buscábamos una hija para adoptar, pero se empeñaron en que nos quedáramos con ella.

Después de recibir los abrazos de su madre y sus hermanos, se acerca de nuevo a Theo y se arrastra hasta su regazo para dormirse. Theo la abraza e intenta descansar para recuperar fuerzas.

Sus hermanos se ponen al teléfono para pedir que suban comida para todos. Sobre todo para Theo que necesitará fuerzas.

Nuestra próxima parada tendrá que ser el orfanato. ¡Será mejor que alguien empiece a hablar!